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Foto del escritorAllen Rodriguez

Cuando Dios llama...

Bueno, saludos y bienvenido/a de nuevo! :) Como siempre, es un placer tenerte aquí con nostros.

The burning bush and Moses

Hace apenas unos dos o tres sábados atrás, la pastora de mi iglesia nos pidió a mi esposa y a mí que nos uniéramos a una misión. ¿La misión? Ser parte de un equipo con el objetivo final de multiplicar la iglesia y el reino de Dios. Nos pidió que oráramos al respecto, que le pidiéramos a Dios que pusiera en nosotros el fuego (o no) para unirnos a este equipo, y que simplemente nos pusiéramos en marcha. Eso fue todo. No hay un plan ya trazado, no hay un punto de partida, no hay una guía especial sobre cómo empezar esto. Todo lo que tenemos es un mapa en blanco y una meta. Nada más.


Esto me hizo pensar en la manera en que Dios opera. Moisés no era un líder, todo lo que Dios le pidió fue que confiara en que lo convertiría en probablemente uno de los mejores líderes que este mundo haya visto jamás. Todo lo que Abraham recibió fue: "Oye, deja tu tierra y tu familia, y ve a la tierra que yo te mostraré". Todo lo que los discípulos recibieron fue: "Sígueme". Todo lo que José recibió fue... silencio y un sueño de muchos años atrás. Todo lo que Pablo recibió fue: "Yo te ayudaré". Una y otra vez Dios pidió a la gente que se uniera a Su plan, sin revelar realmente el plan. Nosotros si sabemos cómo terminaron todas estas historias, y si no lo sabes, no dudes en preguntar.


Mi amigo/a, querido/a lector/a, Dios nos llama a cada uno de nosotros de maneras únicas, maneras que solo Él y tú conocen, pero rara vez nos da el plan. Cuando eres llamado a unirte al plan de Dios, sabrás que estás siendo llamado. Esta es la cosa, cuando Dios llamó a Moisés, Moisés sacó todas las excusas en el libro y estas están registradas como tal en la Biblia con el final de que tu y yo entendamos que es NORMAL y HUMANO sentir dudas. Cuando sientes el llamado, también te sentirás desanimado, tentado a quitarte o ignorar la llamada, te sentirás perdido, indigno... y tendrás casi todos los deseos del mundo de no moverte adelante. Pero, ¿sabes cuál es una de las frases más repetidas por Dios en la Biblia? "No tengas miedo". El mensaje es claro: cuando Dios te llama a una misión, confía en que Él te guiará y te preparará para el desafío. Cómo Él va a hacer de ti alguien que esté a la altura del desafío es SU problema... todo lo que necesitas hacer es aceptar el llamado, orar, seguir adelante... Dios hará el resto.


Piénsalo...

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